La extrema derecha y la derecha extrema de toda España está encantada con las posibilidades que ofrece la "insurrección" de Capital Hill. Y con ellas todos los periodistas amarillos que hay en el país, además de todos los que intentan crear opinión en tantos y tantos medios.
El fascismo está armándose para dar la batalla por la supremacía mundial y en España está más que armado.
Hemos de reaccionar, para que no consigan sus objetivos. Están a las puertas de destruir nuestro presente y nuestro futuro. Nuestro pasado ya lo jodieron y bien.